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PROTECCIÓN ANIMAL EN EL TOLIMA

Por Natalia Romero España

Foto tomada por CAPA.

“Esta administración quiso cambiarle la imagen de Centro de Zoonosis, y dejarlo como un centro de atención y de bienestar animal”. De esta manera, Diana Linares una de las trabajadoras del Centro de Atención y Protección Animal (CAPA), en la ciudad de Ibagué.

 

Explica cómo nace CAPA, nombre dado por el alcalde de Ibagué Guillermo Alfonso Jaramillo.

CAPA, tuvo sus inicio con el nombre de Coso Municipal hace alrededor de 14 años mediante una acción popular en la ciudad de ibagué, naciendo como un Centro de Zoonosis donde llegaban todos los animales callejeros de la ciudad. En un artículo publicado el 10 de Agosto de 2016, por el grupo de redacción periodística de El Olfato, medio digital e impreso de la ciudad, mencionan los inicios de CAPA, como el  Coso Municipal, recalcando que este era un centro de bienestar que le daba y le continúa dando prioridad a la fauna callejera en situación de vulnerabilidad, gracias al reconocimiento que ha adquirido CAPA, junto a diferentes fundaciones animalista de la ciudad de Ibagué, se busca dejar un mensaje de concientización a la comunidad sobre la responsabilidad de tener mascotas y cuidarlas.

En el transcurso de los años, ha pasado de una fundación, a la defensa civil, y finalmente a la Alcaldía, donde hace parte del departamento de la Secretaría de Gobierno, adscrito a la Dirección de Justicia, allí  Marco Emilio Hincapié, Director de Justicia y Orden Público, es quien controla y vigila los diferentes proyectos que se realizan en CAPA, brindando los recursos necesarios para la protección de todos los animales que allí se encuentran, Diana Linares menciona: “Se genera un recurso que viene de la administración municipal, para los gastos que tengan de manutención de todos los animales”, donde principalmente se adoptan y cuidan perros, gatos, bovinos y equinos.

RED DE APOYO

CAPA se encuentra conformada hoy, por su Director Jairo Bonilla,  una asesora legal, la parte administrativa, tres veterinarios, una comunicadora social, un diseñador, una persona encarga de la logística y todo el tema de mercadeo, y pasantes de la Universidad Cooperativa. A pesar de ser un centro de protección animal perteneciente a la Alcaldía los recursos con los que cuentan son reducidos en gran medida, pero tienen a su favor una lista de voluntarios y animalista, dispuestos a colaborar en las emergencias que surgen o en recursos que se necesiten para el cuidado de los animales.

Dentro de la red de apoyo se encuentra Misión Animal Ibagué (M.A.I), liderado por Diana Linares, este, es un grupo animalista creado hace 10 años, que cuenta con una de las páginas de Facebook más activas en la ciudad de Ibagué, la cual fue creada hace cuatro años. En la actualidad está conformada por cinco personas, y una comunidad entera de 22,842 seguidores pendientes para colaborar en las diferentes emergencias que surgen, pues las líderes del grupo no pueden hacerse cargo de todos los animales que necesitaba ayuda y cuidados, por esta razón, nace la red de apoyo M.A.I, donde miles de personas tienen la motivación de ayudar a los animales. Diana Linares comenta, “Nosotros como tal no recogemos a los animales porque no tenemos refugio, pero cuando podemos nosotros mismos asumimos los gastos, hacemos eventos y tenemos convenios con veterinarias”, los convenios con diferentes veterinarias ayuda a que los gastos que se van en medicina, exámenes, operaciones, radiologías u esterilizaciones salgan a precios más económicos para las personas que apoyan estas causas, pues en ocasiones son universitarios los que asumen los gastos de los animales.

M.A.I además ayuda a las personas a encontrar animales extraviados, o ha realizar la difusión de las campañas y proyectos que realiza CAPA en la ciudad. Nicoll Castro una joven ibaguereña por medio de la página de M.A.I, quienes en diciembre del año 2017 reportaron un perro que se encontraba atropellado cerca a Makro, llegó al Centro de Atención y Protección Animal cuando decidió ayudar en este caso, “Al llegar a CAPA, fue donde adopté mi animalito, pues en las afueras hay como un pequeño riachuelo, y el gato se encontraba ahí tirado, estaba super enfermo, se veía mal y mi hermana y yo decidimos rescatarlo”. Pese a encontrarse a las afueras de las instalaciones, los funcionarios de CAPA le brindaron el servicio veterinario y le formularon los medicamentos necesarios para el cuidado de Tizón, el gato de Nicoll.

Esta ha sido solo una de las acciones realizadas por Nicoll Castro, pues pertenece al grupo de Misión Animal Ibagué, por la convicción de ayudar a los animales de la ciudad. Durante los dos años que ha seguido a este grupo animalista, ha podido alimentar cinco gatos abandonados en El Pedregal, recuperó un perro enfermo  de sarna en el barrio El Topacio, y ha pagado alrededor de 20 esterilizaciones a perros.

LÍNEA DE EMERGENCIA

Foto tomada por el Centro de Atención y Protección Animal.

Como muchos programas o fundaciones dedicadas a ayudar personas, comunidades, o en este caso específico, animales, las personas en el transcurso de los años encuentran la forma de criticar y poner en entredicho el proceso o la manera en la que se está llevando todo el tema del rescate de los animales. El Olfato el 17 de abril de 2018 lanzó un artículo aclarando las denuncias que se estaban realizando sobre las recogidas irregulares de animales callejeros, y el posible maltrato que estaban ejerciendo los funcionarios de CAPA, contra perros y gatos de la calle. Ante estas declaraciones Jairo Bonilla, Director de CAPA mencionaba que a pesar que si se cuenta con un móvil, este atiende únicamente urgencias avisadas a la línea de ayuda 3203153451, que funciona de 8 a.m. a 12 p.m, y de 2 p.m. a 4 p.m.

El Centro de Atención y Protección Animal, es un programa que como se ha mencionado anteriormente tiene prioridad en la fauna callejera, o en casos específicos judiciales, que son animales que han sufrido abandono o maltrato, y el seguimiento de los casos los realiza la policía ambiental.

Debido al cupo limitado con el que cuentan las instalaciones de CAPA, no se pueden recoger todos los animales de la calle, pues el espacio con el que cuentan en el Centro de Protección y Atención Animal solo tiene capacidad para 100 animales. Para priorizar la entrada de animales a CAPA, cuentan con tres causales principales “La primera es cachorros, madres embarazadas y por último animales que están atropellados o tienen alguna lesión física”, menciona Diana Linares. Durante este proceso el veterinario encargado de atender la emergencia, realiza un chequeo general al animal para decidir si es necesario que se traslade a las instalaciones, pues si se encuentran en perfecto estado, y es trasladado a CAPA puede adquieran una enfermedad, o se le quita la posibilidad de entrar a un animal que se encuentra en estado crítico.

Katherine Gonzalez, veterinaria y zootecnista de CAPA, cuenta el proceso que se lleva a cabo con los animales que entran a las instalaciones por politraumatismo, “Los llevamos a CAPA, les prestamos atención médica, los estabilizamos, recuperamos, esterilizamos y los damos en adopción”.

A los animales que entran a CAPA se les realizan diferentes tests, el primero es el de Distemper, también conocido como moquillo canino, enfermedad infecto contagiosa, el test de Erliquia, causada por la picadura de garrapatas.“Dependiendo de los resultados, se les realizan tratamientos, o si salen negativo simplemente se bañan, desparasitan, vacunan e ingresan a jaulas, para ser dados en adopción, si se cuenta con cupos en las instalaciones”.

ADOPCIÓN

Foto tomada por el Centro de Atención y Protección Animal.

El Centro de Atención y Protección Animal realiza jornadas de adopción cada quince días por la carrera quinta con treinta, aunque en ocasiones estas jornadas de adopción no se pueden llevar a cabo sino una vez al mes por diferentes inconvenientes.

“Los animales mientras se operan, se demoran en recuperar 12 días, entonces, no podemos realizar las jornadas de adopción cada quince días, sobre todo porque muchos animales se operan y son adoptados entre semana en el centro, y cuando llega el fin de semana no tenemos ya animales, o se encuentran recién operados y no han sanado bien”, mencionó Diana Linares.  Sin embargo, las personas se acercan hasta la sede principal de CAPA, para poder no solo adoptar animales, sino también ayudar con cosas que se necesitan en el centro de atención.

Para el proceso de adopción las personas únicamente llenan un formato con la fotocopia de la cédula y un recibo de algún servicio público del lugar en el que vive, esto como precaución a direcciones o información falsa.

Según un artículo realizado por la Secretaría de Gobierno, en el transcurso de enero de 2016 hasta agosto de 2017, un total de 352 animales fueron rescatados. Y en el transcurso del presente año, hasta el mes de abril 130 caninos y felinos han sido adoptados, según informa publicado por El Olfato. Aunque no se lleva el conteo de los animales exactos que han sido adoptados en las jornadas de adopción, puede ser la mitad, teniendo en cuenta que en el transcurso del año se han llevado a cabo siete jornadas de adopción en la ciudad de Ibagué.

Los diferentes animales que son adoptados desde la sede de CAPA, o en las jornadas de adopción cuentan con microchips que permiten hacer un seguimiento de los animales que han sido adoptados, la Secretaria de Gobierno el 4 de octubre de 2017 público las cifras  del dinero que se invirtió en los microchips, Marco Emilio Hincapié hace mención de 22 millones de pesos que permitieron la compra de mil microchips, distribuidos entre los animales de CAPA, y algunos perros que aunque tienen propietario, necesitan del chip por pertenecer a una raza considerada como peligrosa, entre estos se encuentran los Pitbull, Rottweiler, Bull Terrier, entre otros.

“Los microchips se ponen como una inyección subcutánea al nivel del dorso, estos tiene un número de identificación único, como la cédula”, Katherine González, menciona que además se le entrega al propietario un tipo de cédula donde se encuentran sus datos y los del canino, junto al código único del chip, además se entrega una placa inteligente que por medio de una página especial se puede encontrar la información más importante del animal.

Por medio del microchip se realiza un control y registro de los animales adoptado en CAPA, y de sus propietarios, para evitar un futuro abandono. El objetivo que tiene CAPA, es realizar la inserción de microchip a todos los animales de la ciudad para tener un mejor registro de los animales que se encuentran en la calle, y los que cuentan con hogar, pero este no es un proceso fácil.

Katherine González menciona el abandono de un perro que anteriormente había sido adoptando en las instalaciones de CAPA, “hace ocho días un canino regresó a las instalaciones de CAPA, nos dimos cuenta que tenía microchip, y había sido adoptado el año pasado, y toda la información que se encontraba en la tarjeta era errada”, este es uno de los casos que se suman a los causantes que para la adopción se exija un recibo de la casa, pues se evitan este tipo de casos que entran a proceso judicial o fiscal.

Diana Linares, constantemente hace hincapié en que lo ideal es que se evite el abandono, pero, “No es tan fácil, nos toca hacer un trabajo interdisciplinar; trabajar con la Secretaría de Hacienda para que asigne una cuenta bancaria donde van a ir los fondos de la venta de ese chip, por esta razón debe de ser aprobado por el consejo, y no es sencillo”.

Este microchip  permitiría proteger y cuidar a los animales adoptados, también se cuenta con otros mecanismos de protección; CAPA realiza visitas de control a las casas que decidieron darle la bienvenida a un animal, estos seguimiento se realizan a partir del primer mes, aunque en ocasiones debido a las largas distancias que se deben hacer a veredas, municipios o corregimientos del Tolima para el seguimiento de adopción, se pide evidencia fotográfica para comodidad de los funcionarios de CAPA.

De igual forma, CAPA brinda asistencia los primero 15 días, Diana Linares menciona, “Los primeros 15 días nosotros les damos asistencia veterinaria gratuita, para que las personas que adopten vayan y revisen si el animalito necesita de alguna medicación o se enfermo”. Esto debido a que los animales al salir de las instalaciones sufren de estrés y depresión por los cambios que están sufriendo, también se encuentran casos donde las personas no realizan los cuidados necesarios o no los vacunan cuando son adoptados y esto provoca que se enfermen.

En ocasiones el seguimiento se realiza por dos meses más, para evitar que no se cometa ningún tipo de maltrato al animal adoptado, aunque en los casos que esto sucede se encuentra la protección de la ley 1774 de 2016, la cual considera a los animales como seres sintieses, que necesitan de protección y atención a los cuidados, incumplir esta norma puede causar una multa desde cinco salarios mínimos, hasta 36 meses en prisión.

Actualmente CAPA tiene como objetivo a largo plazo de dar la oportunidad a las personas de ir como voluntarios a ayudar en el proceso de recuperación y adopción de los animales desde las instalaciones, pero como es un centro lleno de enfermedades los cuidados que se deben de tener sn bastante altos, como para permitir a que todos las personas que lo deseen se acerquen a las instalaciones, de igual forma todos las personas que lo desean pueden acercarse a realizar donaciones, Diana Linares menciona algunos objetos necesarios para donaciones, “Las personas que como tal deseen vincularse para donar, por ejemplo cosas que no podemos solicitar mediante licitación, una colchoneta, cobijas, toallas”.

El Centro de Atención y Protección Animal, es un voz a voz, que logró su objetivo de concientización sobre cuidado animal, y la adopción de animales, por medio de la ayuda voluntaria y el trabajo en equipo con los animalistas de la ciudad de Ibagué, que se preocupan por el bienestar de los animales vulnerables.

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