Por:  Laura Feria Castro

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- Cuando me preguntaban: ¿qué estudiaba?

- Yo les contestaba:  Comunicación Social y Periodismo.

Y me decían: “Qué chévere, vas a salir en la televisión“. Yo solo los miraba, les sonreía y les decía:

- “No, a mi no me gusta la televisión; comunicación no es solo eso“.

Es a veces complicado hablar y explicarle a una persona lo grande que es el campo que tiene nuestra carrera.

Desde que entré a la Universidad  a estudiar esta carrera me llamó la atención Comunicación organizacional o corporativa. Recuerdo la primera materia que vi y la amé, era con la profesora María Fernanda, “Gestión en la comunicación“. Hubiese deseado todos los días de mi vida, que todas mis materias fueran de esa línea. Pero qué mejor que conocer nuevos campos y tener la certeza que para mí, esta era la mejor.

Vi demasiado lejos el día de poder escribir mi tesis: ¡Se los juro! Esto no lo veía venir.  Era un 10 de agosto del 2018, cuando me llegó un correo del profesor Orlando Barón, en donde básicamente decía que nos encontrábamos con él en la tarde para dejar claro lo de Semilleros. Sólo tenía nervios, sabía que quería hacer organizacional, pero no tenía un tema como tal. Ese día nos reunimos con el profesor y nos explicó las bases que debíamos tener en cuenta para ejecutar nuestro tema. Yo me hice con una amiga, con María Paula Nuñez, conozco su ritmo, conozco sus gustos y sabía que con ella iba a salir un buen trabajo de grado.

Lo único que teníamos claro era que queríamos hacer nuestro trabajo de grado en un Semillero de Comunicación organizacional, es por eso que nos ubicaron en el Semillero de la profesora Tatiana Avila, GECOM.  Gestión de Estrategias de Comunicación. La docente nos explicó y realmente nos llamó bastante la atención esta línea de profundización.e gusta todo lo que tenga que ver con empresas, así que la profesora nos sugirió buscar alguna empresa, en la cual pudiéramos crear estrategias de comunicación internas y externas, para mejorar los procesos de la organización.

Nuestro mayor anhelo y sueño era intervenir Coca Cola  o Cemex. Dos empresas que están posicionadas a nivel mundial y qué mejor que trabajar con alguna de  las dos. Soñábamos en ver en nuestras hojas de vida el nombre de alguna de estas dos empresas. Pero... ¡Soñar, no cuesta nada!. Primero pensamos y dijimos qué tan viable era ir a alguna de las corporaciones; Coca Cola quedaba cerca, pero Cemex quedaba mucho más lejos. Decidimos optar y quedarnos con la primera opción. Emocionadas, angustiadas, con muchos ánimos llegamos a la planta de Coca Cola con una carta realizada por nosotras dos, felices y esperanzadas. Llegamos a las 2:00 pm, nos atendieron media hora después. Fueron los treinta minutos más largos de nuestras vidas. Ese día Ibagué alcanzaba los 32 grados, el cielo estaba azul y  los rayos de sol ardían; estábamos vestidas de negro y de pie esperando que pasaran esos minutos que, para mí, eran infinitos. Salió una señora, nos atendió, nos recibió la carta y nos dijo: “Yo les recibo la carta, pero no se ilusionen“.

No solo teníamos pensado esas dos empresas, teníamos otras opciones. Decidimos ir ese mismo día a Mercacentro,  una de las cadenas de supermercados más prestigiosas del departamento del Tolima. Nos llamaba la atención poder intervenir este supermercado, pues es reconocido por satisfacer las necesidades básicas de los tolimenses.  Uno le puede preguntar a cualquier persona si conocen este lugar, y tengo por seguro que les van a responder que sí. Por esta razón, me pareció importante abordar uno de sus puntos de venta Mercacentro 10, ubicado en el barrio el poblado vía picaleña.  

La comunicación, el servicio al cliente, la amplia infraestructura y el mayor número de trabajadores han hecho destacar Mercacentro 10 de los otros. Comenzamos a Desarrollar nuestro trabajo de grado a mediados de agosto. Nuestro propósito, fortalecer los procesos de comunicación a nivel interno y externo de dicho punto de venta a través de un proyecto de intervención. Nuestra experiencia ha sido grata. Desde que  realizamos el acercamiento de Mercacentro 10, nos atendieron bien, uno se siente como en casa.

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Pero, llegó el día inesperado, miércoles 24 de octubre del presente año, Tercer coloquio de investigación. Nuevamente estábamos nerviosas, pues no era contar nuestras experiencias a la profesora Tatiana, que ha venido acompañándonos en este proceso, sino a los demás estudiantes de Comunicación Social y Periodismo. No es fácil, pararse al frente de un grupo de personas y exponer el tema que define tu trabajo de grado, contar las experiencias y mostrar lo que llevamos adelantado. Pero, todo fue excelente, nos fue muy bien en nuestra exposición, un par de sugerencias nos dió la profesora Ángela, pero todo  salió bien.

Ese día que veía lejos, está llegando a su fin, sólo faltan siete meses para acabar por completo nuestra tesis. El tiempo está volando y este  no espera a nadie. Esperamos dar lo mejor de nosotras en esta intervención, que de seguro nos servirá como experiencia de vida y laboral.